Este es el monumento más destacado de Tamsui a la participación extranjera en Taiwán. Construido por primera vez en 1629 por los españoles, el Fuerte Santo Domingo estaba destinado a ayudar a la imposición del dominio español sobre las poblaciones locales chinas y aborígenes en el norte de Taiwán.
Este fuerte fue capturado por los holandeses en 1642 cuando expulsaron a los españoles de la isla. Reemplazaron la empalizada construida por los españoles por un fuerte de piedra. El fuerte llegó a ser conocido como el «Castillo de Hongmao» (Fuerte de los Pelirrojos) en referencia a las coloridas cerraduras de sus ocupantes holandeses.
En 1867, los británicos arrendaron el fuerte y emprendieron renovaciones masivas, que incluyeron la construcción del imponente consulado británico en la sección oriental del complejo de la fortaleza. Su terraza de ladrillo rojo y tejas rojas complementan la combinación de colores y el diseño de la fortaleza.
La posición del castillo de Hongmao con vistas a la desembocadura del río Tamsui lo convierte en un lugar escénico particularmente atractivo, especialmente al atardecer.
